viernes, 24 de septiembre de 2010

El muchacho del Kiosko(señor kioskero parte 2)

 Hacia un año que se conocían. En realidad solo se cruzaban. Ella trabaja a tres cuadras de su local. Era contadora en un estudio. Una joven con muchos planes pero sola o mejor dicho mal acompañada por la soledad. Había tenido malas experiencias pero nunca quiso terminar de hablar de eso.
Empezó a trabajar en un estudio contable un día antes de su cumpleaños numero 26. Todos los jueves tenia natación y un kiosko muy pequeño le quedaba de pasada. Entonces siempre compraba chicles o gaseosa  o alguna cosa que necesitaba alli. Pero siempre en el mismo kiosko. Dijo que el muchacho de aquel lugar era algo extraño. Siempre estaba nervioso y se trababa al hablar. Así que a pesar de su simpatía ella nunca le saco conversación, claro hasta el día de su otro cumpleaños.
Ella estaba tan feliz. Y era obvio, le aumentaron el sueldo por tener un año de antigüedad- algo precoz pero mi gusto, pero ella tuvo suerte- y quería contárselo a alguien. Con tan mala suerte que no tenía crédito, entonces como justo fue jueves y debía ir a natación, paso por aquel kiosko y lo saludo al chico y compro algo dulce para celebrar. Le dijo que hacia un año que iba a comprar al mismo lugar ya que la primera vez que había ido había sido su cumpleaños y obviamente también lo era aquel dia. Aunque ahora después de tanto tiempo nos damos cuenta que le mintió. La vez anterior su cumpleaños había sido un día antes de ir a natación pero, en la emoción de intentar hablar con alguien ella dijo cualquier cosa. El muchacho respondió sonrojado ”¡Feliz Cumpleaños!”.  Y ella se fue muy contenta a llamar en algún locutorio a alguna amiga.
A partir de allí, todos los jueves hablaba algo con aquel extraño kiosquero que le ofrecía solamente su sonrisa tímida. Y me dijo que con el tiempo lo miraba con otros ojos, ojos confundidos, ojos de cariño. Sin darse cuenta los dos tenían uno el número del otro. Los cumpleaños fueron pasando. Y las miradas se confundían al unisonó. Las vidas de ella y el se iban entrelazando. Llamadas van, salidas vienen. Los dos iban creciendo en sus proyectos y llego el punto en el que se sorprendieron creando proyectos juntos. 
Me dijeron que se casaron a las tres años de conocerse, dos de novios y uno de vivir juntos. Y si, es extraño y a la vez romántico. A veces suele ser hasta increíble pero asi me dijo mi mama que conoció a mi papá.  

4 comentarios:

  1. amo tus cuentos nubesiita!!! soi tu fan N1 y tu admiradora secreta! nunca sabras quien soi ! muajajaja!! ya toi Flaseamdooooo TE AMO♥

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  2. Noooooooooooooo por Dios, me encantó jajaja
    me encanta este Madri totó, mal mal mal ♥ jaja te amo ídola :D

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  3. creo qe no hace falta aclarar qe los cuentos NO SON (x ahora) NINGUNO VERIDICO jaja Gracias por leer Las Amoo ♥

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  4. Muy copado, me encantó el que haya dos puntos de vista de una misma historia. Hay talento, señorita, hay talento.

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